La Ermita de Nuestra Señora del Buen Camino, patrona de Aravaca (Madrid), ha amanecido mancillada con pintadas ofensivas de tintes satánicos en lo que supone un nuevo ataque a los sentimientos religiosos de miles de ciudadanos perpetrado por quienes no respetan a sus semejantes y utilizan la libertad que proporciona la democracia para atentar contra sus más elementales cimientos.
Una pintadas inquietantes que coinciden con multitud de ataques perpetrados contra Templos e Imágenes devocionales que se repiten por todo el universo y cuya frecuencia continua una senda ascendente ciertamente preocupante. Los episodios más graves registrados en las últimas semanas han tenido por objeto la catedral de Nantes o la Sangre de Cristo, atacados con fuego, provocando una auténtica tragedia sentimental, devocional y artística.
No hay comentarios:
Publicar un comentario