La Hermandad de San Benito Abad de Tocina–Los Rosales fue objeto de un nuevo ataque a su Capilla este lunes. Los miembros de la Junta de Gobierno de esta Corporación, filial de la Hermandad Matriz de San Benito de Castilblanco, se percataron a primera hora de la mañana de un vertido de aceite que afecta al pórtico de su capilla.
El ataque se produce cuando aún no han terminado de reparar los daños del último atentado contra esta Capilla, que se produjo a finales del mes de junio, lamenta la Hermana Mayor de la Hermandad, Josefina González. A lo largo de la mañana se han personado en el cuartel de la Guardia Civil para interponer una nueva denuncia por este suceso que empieza a preocupar a los devotos de San Benito.
«Toda la puerta de entrada ha amanecido este lunes rociada de aceite de motor rebajado con gasolina», explica Josefina, estupefacta como el resto de personas que integran la junta de gobierno de esta hermandad de Tocina–Los Rosales por el segundo atentado que se produce este verano sobre su capilla.
«En la primera ocasión parecía haber una pista de hacia dónde nos llevaban las manchas del aceite que se vertió sobre la fachada, en esta ocasión se repite el vertido pero lo han hecho de manera más cautelosa» relata la Hermana Mayor, y abunda: «no sabemos qué está ocurriendo porque la Capilla lleva más de veinte años en el mismo lugar y nunca ha ocurrido nada ni es un lugar que moleste a los vecinos».
Según el relato de la Hermandad, el vertido sobre la fachada afecta a la zona de la puerta de acceso a la Capilla, y se ha producido de derecha a izquierda provocando una laguna del líquido viscoso en la parte de la izquierda que afecta también al acerado y parte de la calle.
Con la reciente festividad de San Benito Abad, el pasado 11 de julio, que la Hermandad de Tocina – Los Rosales festejó celebrando los cultos en la Parroquia de Tocina y el traslado de su imagen el pasado mes de julio, y ante la proximidad de la romería que celebran junto a las demás hermandades filiales de Brenes y Cantillana en Castilblanco de los Arroyos a finales del mes agosto, los sambeniteros no han podido aún hacer frente al arreglo de la fachada de la Capilla tras el anterior vertido.
«Había que picar otra vez la fachada de nuestra capilla y repellarla de nuevo, y nuestra hermandad no tiene en estos momentos para hacerlo», lamenta la Hermana Mayor, que ante la repetición del vertido aboga por no restar importancia al suceso y lo denuncia públicamente. «Lo hacen para hacer daño porque el vertido de aceite no es algo que se pueda quitar fácilmente y además es sólo en la fachada de la capilla, no en ninguna otra fachada o punto de las calles de alrededor», detalla.
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